Tener un hijo es una de las cosas más increíbles que podrá pasarte en la vida, y muchas veces cambia tu forma de ver las cosas y hasta tu personalidad, haces cosas que jamás creíste que podrías hacer.
También genera incertidumbre, miedos, y suposiciones sobre futuro. Son sentimientos completamente normales porque aunque leas miles de artículos, libros y recomendaciones, jamás habrá un manual para convertirse y ser buenos padres. Sin embargo, queremos compartirte algunos tips básicos, pero muy efectivos, que te servirán cuando llegue el momento de comenzar a caminar junto a alguien que espera todo de ti y a que le enseñes todo lo que sabes.
- La compresión es clave para entender las actitudes de tus hijos.
- Ponte en los zapatos de ellos siempre. Recuerda que eres adulto y que ellos apenas comienzan a aprender.
- Aplica lo que predicas. Ser un buen ejemplo es clave para la crianza de tus hijos.
- Se vale equivocarse. Así que no es necesario regañar excesivamente por cosas que en realidad no valen tanto la pena.
- Cambia las palabras negativas por palabras positivas. ¡Demuéstrales buenas actitudes!
- Busca el equilibrio entre ser exigente y amoroso.
- Participa con amor y dedicación en sus pasiones, demuéstrales que te interesan sus gustos y que amas verlos triunfar.
- Jamás los obligues a creer en algo, deja que ellos descubran en qué quieren creer y trata de aceptarlo.
- Por último, recuerda siempre escuchar tu corazón cuando tomes decisiones que los involucren, allí siempre está la respuesta.